Natalia Vásquez M.D, M.Sc
¿El Coronavirus qué es? De cuento chino a pandemia.
El Coronavirus es pandemia y el mundo se defiende a ciegas… sin medicamentos ni vacuna.
1. ¡¡Ahí viene el coco!! … ¿Cómo empezó esta historia?
En diciembre de 2019, cuando por primera vez se escuchó la palabra Coronavirus, nadie imaginó que aquello vendría a cambiar nuestras vidas.
Para nosotros, China se escucha distante y ajena, pero hoy sabemos que las distancias en el mundo moderno son relativas. La pandemia y la cuarentena son ahora nuestra realidad.
El SARS-CoV-2 causante de la enfermedad por coronavirus 2019, por su acrónimo en inglés COVID-19 (coronavirus disease 2019), era un virus exclusivo de ciertos animales, que mutó y mutó hasta lograr dar el gran salto (zoonosis) .
Como lo refiere la Organización Mundial de la Salud (WHO) [1] este virus aprendió cómo infectar al ser humano, fenómeno llamado zoonosis, y desde un mercado de comida de mar en Wuhan, provincia de Hubei en China, inició la pandemia.
2. ¿Qué es el Coronavirus?
Este pequeño virus, con una membrana de lípidos (grasas) que protege y envuelve su material genético y unas cuantas proteínas, está dejando al mundo patas arriba.
Es su proteína S, la llave del éxito, la combinación ganadora para encajar en el receptor de la enzima convertidora de angiotensina, presente en las células de nuestros pulmones, entre otros órganos, cuyo efecto contribuye a la contracción de nuestros vasos sanguíneos y por consiguiente, a la regulación de nuestra presión sanguínea. [2].
Sin embargo, nosotros también tenemos un haz sobre la manga, nuestras mejores armas tan sencillas como eficaces: jabón y distancia.
Al conocer la mayor debilidad de nuestro enemigo, deshacemos su membrana de grasa, su defensa.
La desintegramos con jabón y al mantener la distancia, lo dejamos condenado en el aire, sin un nuevo huésped, otro ser humano para infectar[3].
3. ¿Y la transmisión?
El virus y su transmisión siguen en investigación, lo que tenemos seguro es que su capacidad de contagio es mucho más eficiente que nuestra capacidad de detectarlo y por consiguiente de contenerlo.
Se transmite por pequeñas gotas que expulsa una persona infectada al toser o estornudar, y que pueden propagarse en el ambiente[2].
De esta manera el virus es lanzado cual proyectil, entrando directamente a nuestro sistema respiratorio, o por aerosolización al hablar[4].
Esto significa que estar en contacto cara o cara, o compartir el mismo ambiente podrían ser un riesgo. Pero esto continúa siendo objeto de debate y de estudio.
Además, el hecho de que el virus sea contagioso antes de causar síntomas, le da a la enfermedad una alta capacidad de propagación.
Este potencial de contagio y por ende de magnitud, no lo mostraron otros coronavirus, como el SARS-CoV, asociado al Síndrome Respiratorio agudo severo, que causó epidemia en 2002-2004, o el MERS-CoV, asociado al Síndrome Respiratorio del Medio Oriente 2012-2016, los cuales no alcanzaron dimensiones de pandemia[5].
Como si fuera poco, este nuevo coronavirus, tiene la capacidad de sobrevivir en distintas superficies desde algunas horas hasta días[4].
Es aquí donde nuestras manos pueden traicionarnos, al contaminarse fácilmente y entrar en contacto con nuestras mucosas de la nariz, boca u ojos nos infectan.
4. ¿Cómo se hace el diagnóstico?
Más del 80% de las personas infectadas con Covid-19, no serán detectadas, las cifras oficiales difícilmente reflejarán la realidad[6].
Mediante pruebas poco invasivas como el frotis naso-faringeo y las muestras sanguíneas, que son evaluadas mediante análisis molecular, se confirma o no la presencia del virus en nuestro organismo[2].
Otras son las pruebas rápidas de detección, pero en ellas se sacrifica su capacidad de exactitud.
Lo que provoca que no se detecten personas que portan el virus, reportándolos como si no lo tuvieran “¡Soy negativo!” -pero la verdad es otra…-, fenómeno denominado como: “falsos negativos“.
¡ADVERTENCIA! las pruebas no podrán ser realizadas a todos los infectados, ni siquiera a la mayoría que presenten alguna sintomatología, se considerarán prioridad a quienes presenten cuadros moderados a severos.
5. ¿Cómo ataca el Coronavirus ?
Al iniciar la invasión, la primera línea de defensa en nuestra mucosa nasal, ojos o faringe empezarán el enfrentamiento.
Si nuestro sistema inmune es competente y no tenemos ninguna enfermedad, medicamento o situación que represente desventaja, eliminaremos el virus completamente y casi sin escándalo.
En ocasiones el enfrentamiento provocará síntomas como dolor de garganta, fiebre, tos, malestar general, pero la mayoría de las veces no lo notaremos. Así de impresionante y letal es nuestro ejército[7].
Desafortunadamente, no para todos los afectados será sencillo, la gripa y la neumonía pueden complicarse si el sistema inmune está debilitado.
Esto a causa de medicamentos que lo inhiban, como aquellos que combaten el cáncer o los que usan las personas a quienes se les haya realizado un trasplante de órganos.
Asimismo, pueden verse en aprietos para luchar con su máximo potencial quienes, debido a otras enfermedades, sus cuerpos vienen con batallas históricas, como por ejemplo el padecimiento de diabetes, obesidad, hipertensión, un corazón cansado, arterias tapadas, un cerebro apagado, unos pulmones ya asfixiados (a causa de cigarrillos o enfermedades pulmonares) o porque nuestros soldados ya no están en edad para hacerle frente a esta desconocida invasión. En el peor de los escenarios, un cóctel de factores provocará que salir victoriosos sea una proeza costosa y difícil[7].
6. ¿Y entonces por qué los jóvenes sanos mueren?
Cuando la cura es más letal que la enfermedad…
Existe otro posible escenario, que según los expertos explica por qué personas jóvenes y sanas pueden desarrollar una enfermedad severa e incluso morir.
Este fenómeno es llamado Síndrome Tormenta de Citoquinas[8], suena muy complejo, pero el concepto no lo es, aunque su tratamiento sí.
Las citoquinas son proteínas que se encargan de regular la comunicación entre las células. Son las que tocan el cuerno que llama a la guerra.
Imaginémonos como si volviéramos al medioevo, por lo tanto, la única forma de comunicarnos y comandar un ataque fuera a través de ese cuerno de estos mensajeros. Por razones que aún se estudian, estos se vuelven locos y salen todos a las calles a soplar ese cuerno frenéticamente.
Entonces, como si fuera el apocalipsis, van sembrando el pánico, enlistando a todo soldado y activando todas las unidades de batalla.
Desencadenando una respuesta caótica, un ataque incontrolable de este ejercito hacia el virus, ataque que a su vez lesiona órganos y tejidos, como si se lanzaran miles de misiles destruyendo todo a su paso. Una traición de nuestro propio sistema inmune.
Se ven sacrificados primero los pulmones y así el resto de los órganos, produciendo un fallo multiorgánico, potencialmente fatal[7].
Además, a medida que avanza el tiempo, las investigaciones permiten entender mejor el modus operandi de este virus, que parece ser mucho más complejo, incluyendo un daño a nuestra increíble red vascular, pero este tema se merece todo un artículo.
7. ¿Pero si el Coronavirus es cómo la gripa, porqué tanto pánico?
Afectación respiratoria similar, un nada que pasa a ser gripa y de pronto llegar a neumonía y sorprender con la muerte[9].
El virus de la Influenza estacional y el Coronavirus (Covid-19) tienen sus similitudes, sin embargo, el Coronavirus a alcanzado un gran impacto, gracias sobre todo, a su mayor letalidad[10].
¡ Acompañanos en los próximos artículos y sigámosle la pista a este Coronavirus !
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Apoyo redacción:
Cindy Ramirez Psicóloga Clínica.
Te invitamos a que conozcas más sobre este tema, consultando las referencias bibliográficas que encontrarás en la siguiente pestaña.
Ref 1 Coronavirus disease 2019. WHO. March 2020
Ref 4 Aerosol and Surface Stability of SARS-CoV-2 as Compared with SARS-CoV-1. The New England Journal of Medicine. April 10, 2020
Ref 6 Infected but Feeling Fine: The Unwitting Coronavirus Spreaders. The New York Times. March 31, 2020.
Ref 8 COVID-19: consider cytokine storm syndromes and immunosuppression. The Lancet. March 2020.
Ref 9 Coronavirus Infections—More Than Just the Common Cold. JAMA, January 23, 2020.
Ref 10 Harvard Medical School. A Harvard infectious diseases doctor looks at COVID-19 (recorded 3/3/20).
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